La Diputación recuerda la importancia de evitar el tránsito en las zonas del litoral con presencia de chorlitejos y otras especies vulnerables
El alto número de personas que acuden a las playas gaditanas durante la temporada estival, el impacto de actividades recreativas, el uso de maquinaria pesada, la presencia de perros sueltos o la pérdida de la vegetación dunar son algunos de los peligros a los que se enfrentan las poblaciones de chorlitejo patinegro (Charadrius alexandrinus Linnaeus) en las costas de la provincia. No obstante, y a pesar del descenso registrado en los últimos 10 años, la provincia de Cádiz es una de las principales reservas de esta especie a nivel nacional. Para que así siga siendo, la Diputación de Cádiz reactiva cada temporada de anidación y cría una serie de medidas con las que pretende contribuir a la conservación de la especie: desde asistencia técnica a los ayuntamientos que lo requieren hasta la difusión de consejos para preservar los entornos naturales en los que habitan tanto chorlitejos como otras muchas especies de fauna y flora fundamentales para el equilibrio medioambiental.
En este sentido, en la mayoría de las playas de los municipios de menos de 50.000 habitantes, entre ellos Chipiona, se han colocado ya los materiales de balizamiento facilitados por la administración provincial para acordonar los sistemas dunares. De esta forma, trata de evitarse el tránsito de personas por la principal zona de anidamiento de los chorlitejos. Pero no sólo eso, la limitación de tránsito de personas, perros y maquinaria por los cordones dunares y sus zonas próximas, contribuye de manera muy significativa a la fijación de dunas, al asentamiento de vegetación vulnerable y, por ende, a la mejora de la calidad de todo el ecosistema para acoger fauna protegida como chorlitejos, charrancitos o camaleones. Un ecosistema litoral saludable, es además una garantía de protección para las zonas urbanas colindantes, por ejemplo, ante inundaciones o temporales, recuerda la Diputación.
Precisamente, personal técnico del Área de Transición Ecológica y Desarrollo Urbano Sostenible ha realizado una visita de campo junto a Salvador Solís, coordinador de SOS Chorlitejo Patinegro y otros miembros del colectivo, para conocer de primera mano la efectividad y el estado de los equipos entregados por la Diputación. El suministro se produjo en la anterior campaña de 2022 a los municipios que lo requirieron: Chipiona, Puerto Real, Conil de la Frontera, Vejer de la Frontera, Barbate, Tarifa, Los Barrios, además de la Entidad Local Autónoma de Zahara de los Atunes. En total, cerca de 3.000 balizas, 14.000 metros de cuerdas y más de un millar de carteles con los que se limita el paso y se informa de la presencia de flora y fauna sensible en la zona.
El personal de la Diputación ha comprobado que el material se encuentra en condiciones óptimas para permitir su aprovechamiento en la campaña actual por lo que, en principio, a no ser que sea necesario atender algún requerimiento específico, los sistemas de balizamiento están siendo reutilizados. Algo que, además, coincide con la filosofía del reciclaje y aprovechamiento de los recursos que fomenta el Área para reducir la contaminación.
